Roberto Gutiérrez Flores/Notiecos/
Tuxpan
“El Lamento de Luzbel”, obra que
representan los actores de la pastorela de la cuadrilla denominada Arribeña
“recuerdo de don Juan Velázquez”, en el escenario montado en el Colegio Juana
de Arco, y mantiene aun como fechas el 1 y 6 de enero.
Una de las tradiciones que vienen
del tiempo de los evangelizadores en Tuxpan, y cuyo referente más antiguo con
que se cuenta son las cuadrillas arribeña y abajeña, contándose actualmente con
tres cuadrillas que escenifican, durante estos días, obras en las que narran
las peripecias que padecen un grupo de pastores para poder llegar a su objetivo
de al niño Jesús.
Los ensayos de las obras
comienzan con anterioridad al mes de diciembre, llevándose a cabo el día 24 el
ensayo real, en el domicilio que corresponde al Capitán de día que correspondió
este año a Reyes Gil Munguía.
Más allá del ensayo se lleva a
cabo una fiesta previa, en la que acompañados de largas cañas los actores
entonan los cantos propios de las obras conocidos como caminatas, para luego
degustar en la casa de la persona encargada alimentos que se reparten entre los
asistentes, para lo cual el donante cuenta con la colaboración de vecinos, y
amigos, quienes aportan verdura, arroz, gallinas, o si no se cuenta con
recursos trabajo para poder preparar la comida que se reparte en esta fecha.
La fiesta continua el día
posterior en el cual los integrantes de cada cuadrilla llevan las imágenes del
niño al templo, para trasladarlos posteriormente a la casa del encargado de día
en donde es visitado por cuadrillas de danzas de Paixtles, y Sonajeros, para en
la noche cargar la imagen al lugar donde se llevan a cabo las obras.
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