Ojo de agua, Platanar Jalisco.
Armando Montes de Oca
1.
Trayecto de vida.
El
jueves exactamente a las 9:36 de la mañana emprendí el camino con destino al
Platanar, municipio del Estado de Jalisco. El recorrido se hizo en menos de 60
minutos. Durante el itinerario fui observando los paisajes, los cerros, las
praderas y la famosa barranca de Beltrán y lo sinuoso de la misma. Cuando llegué
al lugar establecido pasé por el templo y caminando un poco más es como se
llega al “Ojo de agua” por una vereda empedrada, angosta y sencilla; tanto por
el lado derecho e izquierdo del similar sendero donde se aprecian las siluetas
de los volcanes: el de nieve y fuego. Allí conocí al señor Leovigildo Arcaras
Guzmán de 64 años de edad quien nació en 1946. Él es un hombre cabal,
trabajador, humilde, sincero y de nobles sentimientos. Hombre de campo con más
de 6 décadas de existencia quien me platicaba algo de su vida laboral:
“Fui arriero, en mi
juventud, trabajaba como ordeñador de Vacas, ordeñaba como 50 al día”.
Labor
que le permitió desde muy joven tener muy buenos principios, modales, valores y
todos éstos consolidados en un matrimonio que dio la vida a cuatro hijos. Siguiendo con la conversación tan amena y
agradable en aquel bello paisaje que la naturaleza nos regaló, el señor
Leopoldo contestó:
“Siempre he
trabajado, no me gusta estar de flojo, mi trabajo ha sido en el campo”.
El
lugar era mágico extraordinario e impresionante y el sexagenario me relató:
“fui arriero”. A mucha honra el trabajo que realizó por casi toda su vida. El Diccionario de la Real Academia Española
nos muestra que: “arriero es el que trajina con bestias de carga”. Don Leovigildo
Alcaras es un hombre trabador y este día Santo no fue la excepción. Acompañado
de su fuente de trabajo; el Macho, de nombre Florencio. Este señor de avanzada edad y de paso lento nos contaba
que en ese territorio se aparecen algunos animales como: el jabalí y el venado. Se escuchaba el cántico de las Calandrias,
Jilgueros y uno que otro pájaro de la región y también los relinchidos de su
flamante caballo Sebastián. La
plática con aquel hombre era de otro nivel con miras hacia distintos horizontes,
es decir su vida, su experiencia, su labor, faena y peregrinar en este mundo.
Él nos expone:
“Vendo galones de
agua a 5 pesos, al día llevo los que alcanzo con mi bestia mular (se refiere a
Florencio, su macho). Ella puede hasta 200 kilos y un poco más”.
2.
Aritmética filosófica.
En
este momento notemos algo más del señor Leovigildo Alcaras, en el apartado que
me atrevo a llamar aritmética filosófica.
Durante el día amable lector, Don Leovigildo consumó 7 viajes, cada uno con
4 galones de 20 litros cada uno. Eso sin contar que el sexagenario arriero
físicamente está renco, le cuesta trabajo caminar y no tiene movilidad en uno
de sus brazos. La aritmética filosófica nos declaraba ese día que por cada
desplazamiento transportaba 80 litros de agua y más el peso del señor montados
en su bestia mular. Si multiplicamos 7 viajes y el contenido de los mismos da
como resultado: 4x20 son 80 litros de agua en cada entrego; ahora, esos 80
litros de este extracto nacido por 7 traslados; 7x80 son 560 litros de agua natural
para beber. Esta cantidad la hizo de las 11 de mañana a las 7 de la tarde.
-¿Cómo ven?, ocho horas de trabajo, Don Leovigildo al día se ganó $140 pesos;
hay que recordar que el galón lo vende a 5 pesos, cuando en realidad y la
realidad esas <sardinetas>, <trencillas>; esos galoncillos en la
ciudad cuestan $20 pesos de una reconocida marca colimense. Entonces quiere
decir que algo está mal, ¿Es el gobierno el que no apoya a las comunidades
pobres?, ¿En Platanar no venden agua embotellada?, ¿Los oriundos de esa región
siempre han vivido a expensas del nacimiento de agua donde se apareció la
virgen?, son interrogantes que la operación filosófica expresa en su más fina
ecuación moral, política, social, religiosa y económica.
3.
Arrieros somos y en el camino
andamos.
Bello
refrán de la sabiduría popular y es entendible lo que quiere decir. A los 64
años Leovigildo Arcaras Guzmán y ganando $140 pesos al día que le puede esperar
y si a esto le agregamos que el señor está enfermo se le dificulta el caminar
en su vivir al tiempo; ahora imagínense, subir a la bestia mular el cargamento
de 80 litros en total, separados obviamente en 20 cada galón y luego él se sube
enancas, y así empieza la marcha desde el nacimiento de agua hasta zona poblada.
Atraviesa el rio, camina por el sendero empedrado, trepa la subida, llega a lo
parejo y descarga la mercancía y luego vuelve al “Ojo de agua”. En un solo
viaje obtuvo $20 pesos de ganancia y yo me pregunto algo está mal, ¿Cómo es
posible que lo venda a $5 pesos?, ¿Por qué la gente compra los galones de agua
a ese precio?, ¿Quién es el responsable de que no se actué como debe de ser?
¿Cuántos viajes mas va e emprender el señor para poder ganar un día de trabajo?
Posterior a ello vuelve a su jornada con todas las inclemencias antes
mencionadas. No hay que olvidarnos de la constitución física que el arriero
sufre. Con el humor que lo caracteriza dijo: “este si es trabajo”. Luego me
ilustró:
“El macho es hijo
de una yegua y de un burro, o bien de un caballo y una burra; de la yegua y el
caballo, hay caballitos y de burro y burra, burritos”.
En
aquel momento comprobé los orígenes de Florencio
y Sebastián, y me atormenta otra
duda sobre los cuadrúpedos: el caballo garañón, los mulos, el burro manadero, asno,
el semental, potrillo, alazán y <animal de tiro>. Quiero concluir el
esbozo mencionando lo siguiente, pero antes quisiera saber más de los caballos
de esos que tienen cuatro patas: equino, bruto, cuaco, corcel, palafrén, potro,
jamelgo, jaco, rocín, penco y bridón. En los países de Uruguay, Chile y
Argentina se conocen los irracionales con los últimos nombres expuestos.
Entonces, el Macho Florencio es un
animal del sexo masculino; el burro es el esposo de la burra; y burrada es una
manada de burros. Si se me permite decir algo mas mi abuelito me decía: mijito, los hombres debemos de tener una
vieja y una mula: que la mula no sea tan vieja y que la vieja no sea tan mula.
4. Día
de fiesta en Platanar.
1) Fue una delicia visitar una vez
más este lugar.
2) Fue un placer conocer y platicar
con el señor Leovigildo Arcaras dueño de los cuadrúpedos que llevan los nombres:
Florencio y Sebastián.
3) Arriero significa: mulero,
carretero, mozo de mulas, transportador.
4) Cuenta la historia o bien la
leyenda que una niña se apareció hace 388 años y desde ese entonces el
nacimiento de agua no ha cesado. A unos cuantos metros fue construido el Templo
y la niña aparecida quería jugar con otra niña que iba de visita. Hoy en día en
ese lugar apreciamos un pequeño altar. (Nota: se debe ampliar más los datos de la leyenda).
5) La función de Nuestra Señora del
Platanar se festeja el 5 de febrero.
6) Platanar es el nombre del
municipio. Platanero o platanera es todo aquel sujeto que cultiva o hace
negocio con su (Plátano) fruto.
7) Más vale arrear el burro y no
llevar la carga”. Quiere significar que se preferible ordenar que hacer las
cosas.
8) La burra no era arisca, los palos
la hicieron.
9) Tener arranques de caballo brioso
y llegadas de burro flaco.
10) Rebuzno no llega al cielo.
11) La carga hace andar al burro.
·
Escritor
colimense.
No hay comentarios:
Publicar un comentario