Paloma Guadalupe Casillas Chagoya*
Karl von Vereiter, fue médico que como escritor se ganó el sobrenombre de “el testigo del horror nazi”. Durante la segunda guerra mundial Vereiter se encuentra a cargo del frente ruso, recibe la noticia del fallecimiento de su madre, por lo que se le concede un permiso a su ciudad natal Berlín. Una vez allí es traicionado por su esposa y su amante, un comandante de las SS.
Para colmo de males se le acusa por dar atención a judíos, por este motivo es encarcelado en un hospital que era utilizado para experimentos con homosexuales, gitanos y judíos. Rápidamente el doctor Vereiter pasa de ser un simple preso a realizar diversos experimentos siempre en contra de su voluntad.
Sin duda alguna estoy en contra del racismo, aunque creo que todos en algún momento de nuestra vida lo somos, discriminamos muchas veces inconscientemente y otras tantas conscientemente, es la forma de hacer sentir mal al otro ya sea por tratar de sentirnos superiores o por defendernos de alguna agresión.
El racismo especialmente contra el pueblo hebreo, fue siempre una constante del nacionalsocialismo alemán. Los nazis percibían toda la historia humana como la de una lucha biológicamente determinada entre las razas, entre las formas de violencia racista se puede mencionar las matanzas, linchamientos, asesinatos, etc.
La violencia por pequeña o fragmentada que pueda ser, jamás es totalmente independiente del contexto político en el que se produce. En efecto esta siempre informada o condicionada por el carácter del sistema político, que puede funcionar en otro plano.
Debido a esto de 1939 a 1945, explotó la Segunda Guerra Mundial, donde fuerzas armadas de más de 70 países participaron en combates aéreos, navales y terrestres, murió alrededor del 2% de la población mundial de la época(aproximadamente 60 millones de personas).
La ideología de Adolf Hitler, fue quien llevó a causa directa al estallido de tan mencionada guerra. Esta ideología se basaba en la eliminación de judíos, homosexuales, testigos de Jehová, gitanos y otras minorías; la consecuencia de un espacio vital, para garantizar el futuro a Alemania; la raza como explicación de la historia del mundo y la lucha eterna como la ley. Hitler quería una raza pura creyéndose una persona superior, ya sea por su color de piel, estatura, peso o dinero.
En mi opinión Hitler fue un mal estratega militar, pero a la vez un grandioso político. Poseía un extraordinario carisma capaz de envolver a las masas, además de poseer una gran oratoria y una capacidad de liderazgo notable.
Karl Von Vereiter es un medico del ejército alemán, durante la segunda guerra mundial. Mientras se encontraba en el frente ruso ejerciendo como doctor, recibe la noticia del fallecimiento de su madre, se le concede un permiso para rendirle homenaje, una vez ahí busca a su esposa, la cual al encontrarla se da cuenta que tiene un nuevo amor. Esta por temor de que mataran a su amante, tiende una trampa a Karl, acusado de atender a judíos, por este motivo es arrestado y enviado al castillo de Dachau, el cual funcionaba como un campo de concentración y más concretamente como hospital de experimentos, donde se realizaban todo tipo de atrocidades con aquellos que consideraban “razas inferiores”.
La infidelidad por parte de la pareja me imagino que es una de las peores traiciones que se enfrenta en una relación amorosa, esto fue el caso de Karl y su esposa, ya que por la distancia él no le brindaba aspectos como sexuales, físicos y emocionales, aunque no la justifico ya que cuando se quiere a alguien se está dispuesto a esperar el tiempo que sea necesario.
Rápidamente el doctor Vereiter pasa de ser un simple preso a realizar diversos experimentos siempre en contra de su voluntad bajo coacción. En el campo de concentración vuelva a encontrar el amor, pero esta vez por parte de una doctora llamada Frida Koch.
El campo de concentración de Dachau; fue de concentración nazi y el primero, abierto el 22 de marzo de 1933, en total más de 200.000 prisioneros de aproximadamente 30 países, las estadísticas hablan de 40.000 personas asesinadas.
En Dachau Karl Von Vereiter vivió los momentos más amargos y traumáticos de su vida, al realizar los experimentos que los mismos médicos nazis ideaban utilizando a los prisioneros sin importarles los que estos sufrirían. Esto sin duda fue algo que quedo marcado en la historia de Alemania y considerado como una más de las atrocidades de la segunda guerra mundial.
Semanas antes de concluir la guerra, Vereiter descubre que está enamorado de Frida Koch por fortuna esta vez sí es correspondido y gracias a esto vuelve a creer en el amor. Frida al saber que está embarazada toma cobardemente una píldora de cianuro de potasio provocándose así su inesperada muerte, sin duda alguna esto fue un golpe muy fuerte para Karl.
El saber que jamás volverás a ver a la persona que más amas no es fácil de asimilar, el tiempo es tu mejor amigo para el olvido y esto es lo que Karl necesitaba, que el tiempo transcurriera para olvidar todo lo vivido en el campo de concentración
Un libro inolvidable
*Estudiante del primer semestre
de la licenciatura en Educación Especial
del CREN de Ciudad Guzmán.
del CREN de Ciudad Guzmán.
BIBLIOGRAFIA:
Von Vereirer Karl (1999),
Yo fui medico del diablo,
Ferma, Barcelona.
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