¿Quién es José según los evangelistas?

J.  Jesús Juárez Martín

 (Mt 1,16.18 - 24): Jacob engendró a José, el esposo de María,
 de la que nació Jesús, llamado Cristo.

(Mt 1, 18 – 24) La generación de Jesucristo fue de esta manera: Su madre, María, estaba desposada con José y, antes de empezar a estar juntos ellos, se encontró encinta por obra del Espíritu Santo. Su marido José, como era justo y no quería ponerla en evidencia, resolvió repudiarla en secreto.  Así lo tenía planeado, cuando el Ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: «José, hijo de David, no temas tomar contigo a María tu mujer porque lo engendrado en ella es del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo, y tú le pondrás por nombre Jesús, porque Él salvará a su pueblo de sus pecados». Despertado José del sueño, hizo como el Ángel del Señor le había mandado.

En las citas proporcionadas, San Mateo nos regala la genealogía de José, “hombre justo”,  y por ende de Jesús su hijo putativo, con claridad meridiana.

A continuación en el relato de la adoración de los Magos  venidos de Oriente a buscar al Mesías y ofrecerles sus regalos, José es requerido que proteja al niño y a María, huyendo a Egipto, y estuvo presto al servicio y protección de su familia.

Mt 2, 13  - 15 Cuando se fueron,  el ángel del señor se apareció en sueños a José y le dijo: --Levántate, toma al niño y a su madre, huye a Egipto y quédate allí, hasta que yo te  avise.; porque Herodes va a buscar al niño para matarlo. José se levantó de noche, tomó al niño y a su madre, y partió hacia Egipto, donde permaneció hasta la muerte de Herodes.

A continuación el texto evangélico de San Mateo, nos dice de la voluntad de Dios, para el regreso a su Israel.

Mt. 2, 19 – 23: Cuando murió Herodes, el ángel del Señor se apareció en sueños a José en Egipto y le dijo: --Levántate, toma al niño y a su madre, y regresa a la tierra de Israel, porque han muerto los que atentaban contra la vida del niño. José se levantó tomó al niño y a su madre y regresó con ellos a la tierra de Israel. Pero al oír que Arquelao reinaba en Judea como sucesor de su padre Herodes, tuvo miedo de ir ahí. Entonces avisado en sueños se retiró a la región de Galilea y se fue a vivir a un pueblo llamado Nazaret.

San Lucas, nos habla de la unión de José con María y en otro texto se hace la relación de la paternidad de José y de estirpe real.

Lc  1, 26 – 27 Al sexto mes, Envió Dios  al ángel Gabriel a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una joven desposada con un hombre llamado José, de la descendencia de David, el nombre de la joven era María.

Lucas 4, 22. Todos lo apoyaban y se admiraban de las palabras que había pronunciado. Comentaban: --¿No es éste el hijo de José?

San Juan, corrobora la paternidad de San José con Jesús, veamos estos textos.

Juan 1, 45: Felipe se encontró con Natael y le dijo: --Hemos encontrado a aquel  de quien escribió Moisés en el libro de la ley, y del que hablan también los profetas: Es Jesús, el Hijo de José, el de Nazaret.

Juan 6, 46. Decían: ­­Este es Jesús, el hijo de José, conocemos a su padre y a su madre. ¿Cómo se atreve a decir que ha bajado del cielo?

Apenas un adjetivo: JUSTO, así con mayúsculas, equivalente a colección de  virtudes en grado supremo como hombre de fe, humilde como lo cantamos en su himno, fiel a sus misiones paternales, protector de Jesús y madre, casto esposo de María, sensato ante la vida, en especial en su pasaje con Arquelao, educador del hijo, piadoso, responsable y cumplido padre de familia al llevar a Jesús al templo a los doce años, educador de Cristo Jesús, dócil a la voluntad de Dios al acatar lo dicho por ángel, en fin patriarca, modelo de padre.

Actualizar nuestra relación con san José es primordial, pensar en presente  sus virtudes esplendorosas: son y no fueron, o eran, pretérito y copretérito que nos alejan de la realidad dinámica de la pertinencia de una palabra motivadora en la presencia en nuestros hogares.